19 dic 2009

Ciudad del hombre, José María Fonollosa


PLAÇA DE MOSSÈN VERDAGUER

Somos los más. Los fuertes por el número.

Y hacemos el vacío en torno tuyo
aislándote en un muro de silencio.
O de burlas hirientes si tus gritos
se asoman a las tapias que te encierran.

Trituraremos tu obra mientras vivas.
Dejaremos, no obstante, para ti,
el mañana, el futuro. Es nuestro obsequio.
Sueña en él tus noches marginadas.

Mas no olvides que el hoy nos pertenece.

Y nos lo repartimos. Este trozo
de honores y dinero para aquél.
Para éste y para mí nuevas prebendas...
Ocupamos los puestos importantes.

Nunca permitiremos que se premie
tu originalidad. Ser diferente
a nosostros resulta intolerable,
pues somos los normales: los mediocres.

Somos los más. Los fuertes por el número.

3 comentarios:

nueva gomorra dijo...

Baudelaire y su albatros, pienso. Son casi las 2:oo de la madrugada y bebo vino solo. El silencio no me resulta ningún fastidio, mejor así, más tranquilo; la aprobación ajena nunca fue la cuestión.

Neil Wan Kong -NG-

Anónimo dijo...

4 ediciones de un libro de poesía... Al final no fue tan desconocido Fonollosa

nueva gomorra dijo...

Fonollosa es un gran poeta. Ciudad del hombre ha sido uno de los mejores libros de poesía que he leído ultimamente, aunque en mi caso ha sido relectura. Supongo que su historia personal es como la de tantos otros, me refiero a Kafka y todos los que no pudieron disfrutar del "éxito" literario en vida. Aunque no sé si en realidad se la pelaba.