23 jun 2009

El libro de los abrazos, de Eduardo H. Galeano


LA FUNCION DEL LECTOR

Era el medio siglo de la muerte de César Vallejo, y hubo celebraciones. En España, Julio Vélez organizó conferencias, seminarios, ediciones y una exposición que ofrecía imágenes del poeta, su tierra, su tiempo y su gente.
Pero en esos días Julio Vélez conoció a José Manuel Castañon; y entonces todo homenaje le resultó enano.
José Manuel Castañón había sido capitán en la guerra española. Peleando por Franco había perdido una mano y había ganado algunas medallas.
Una noche, poco después de la guerra, el capitán descubrió por casualidad, un libro prohibido. Se asomó, leyó un verso, leyó dos versos y ya no pudo desprenderse. El capitán Castañón, héroe del ejército vencedor, pasó toda la noche en vela, atrapado, leyendo y releyendo a César Vallejo, poeta de los vencidos. Y al amanecer de esa noche, renunció al ejército y se negó a cobrar ni una peseta más del gobierno de Franco.
Después, lo metieron preso: y se fue al exilio.


Agradecemos el envío de esta textura a Alfonso Javier Molino Delgado, lector de Galeano desde hace años. Muchas gracias.

1 comentario:

nueva gomorra dijo...

Aúpa Moli. Muchas gracias por la colaboración.

Juan
-NG-