Está la tierra seca.
Las ves como tu piel:
cuarteada
y estéril
quebrada sin luz
ni sal ni saliva
ni un puñado de aliento
en las costillas
para salir al sol,
para gritar la vida.
Tú como otros.
Polvo.
Polvo y piedras
y un ciempiés
que ahora corretea
despacio
por tu brazo arriba.
¿Eso es la vida?
Lo aplastas.
Te ves desnudo,
tendido en la cresta de una
duna
de ese desierto negro / que
tanto te asusta.
Es un sueño. Es una pesadilla.
Abres la boca
y ya ni tan siquiera
recuerdas
cómo se pronuncia
la palabra / NADA.
Te sorprendes al sentir
después de tanto
llover desde tus ojos.
Pero ese agua es salada.
No calma la sed.
Te asfixias. Boqueas.
Eres un pez / fuera del agua.
Eres un pez / fuera del agua.
Cenizas en la lengua.
Sigue adelante.
Es lo único que puedes hacer.
Juan Cruz López
4 comentarios:
esa es la vida
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Buen poema, como siempre. Demasiado duro para un lunes por la mañana.Ángel
Estos poemas, Juan, me siguen pareciendo muy distintos a los demás. A mí, particularmente, me gustan más los otros. Estos son muy secos y, como dice Ángel, muy duros. Pero son buenos. Es cuestión de qué tipo de poesía leemos.
Agradezco los comentarios.
Un saludo.
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