16 jun 2010

Asiento trasero


Abre las piernas en el asiento trasero del coche,
pero olvida mi matrícula,
al igual que yo haré con tu nombre.
Déjame tus besos mercenarios en la guantera,
junto a las llaves de casa y cierra despacio,
no vayas a sacralizar con un portazo
esta herejía del amor que acaba
cuando te subes tus lindas bragas de princesa.

Ángel Rodríguez

1 comentario:

Jesús Garrido dijo...

...y cierra despacio, por si te pilla alguno de tus extremos.