20 ago 2012

Esperanza



Lo intenta.
Si alguien pudiera verla...
Encorvada sobre un papel en blanco,
iluminada por una débil luz parpadeante. Una vela.
En las rodillas, una manta, para paliar el frío de la casa.
Debe tener frío. Se nota en sus dedos,
en el tono de cera de su rostro.
Y sin embargo, no parece importarle,
los ojos siguen fijos en la mesa,
De vez en cuando los dirige hacia la ventana.
La saludo con un leve movimiento de cabeza.
No responde. Tal vez no me ha visto.
Me pregunto qué escribirá.
Y con qué esperanza.

Rakel Rodríguez

7 comentarios:

Anónimo dijo...

me encanta el ritmo tan lento del poema, como a pincelazos. muy bonito.Angel

derramada dijo...

Enmudecedor.

RaRo dijo...

Este poema es de Rakel Rodríguez. Publicado en el libro "Puta y Atea" (2005). Saludos.

nueva gomorra dijo...

Perdona Rakel, me he confundido de recio...

Roque dijo...

qué gran poema

RaRo dijo...

besos

Little_dreamer dijo...

me ha gustado mucho... muy profundo des de mi punto de vista.
Por cierto soy nueva en esto de los blogs si puedes seguirme unalittledreamer.blogspot.com