10 oct 2011

Bajé del cielo


Ayer el viento soplaba en la playa hacia el este,
cogí mi mano y la saqué del cielo
y te toqué creyendo
que tú sabías que era mi mano.
Tirabas de ella fuerte,
intermediada con pequeñas caricias
que forzaban mi respiración
y gemidos diminutos.
Que no se perturbe
ni el silencio de la noche
ni el descanso de nuestros compañeros de aventuras.
Decidido bajé del cielo
y allí, presente,
me hiciste desaparacer con tu mirada,
de la que salió un torbellino
que me hizo volar
a mí,
a mi olvido y mi rencor.

Curro Jiménez Melero -NG-

5 comentarios:

Darío dijo...

Me gusta, me hizo volar...y Rothko...

Anónimo dijo...

Rothko es un clásico en New Gomorre

Anónimo dijo...

Fuerte, envolvente, emocionante el comienzo y esto de aquí:

"Tirabas de ella fuerte,
intermediada con pequeñas caricias
que forzaban mi respiración"...

El torbellino del final es quizá un poco manso... aunque, por otro lado, quizá deba serlo para poder desplazar eficazmente, no tanto al yo lírico, pero sí el olvido y sobre todo, el rencor.

Gracias por cada texto, por cada poema.

María

mineártpolis dijo...

A mí lo que me gusta es

Que no se perturbe
ni el silencio de la noche
ni el descanso de nuestros [compañeros de aventuras.]

julia dijo...

a mi lo que me gusta es que el cazador de pompas, adornado por rothko, sea un gomorrita... es un honor pertenecer a una patria asì... perdón, dije patria? quería decir ilusión...

besos curro.