Qué bueno que se acaben los años
A la hora indicada en el sitio equivocado
Que se apague diciembre y me olvide de enero
Qué rico el lejano rumor de un millón de explosiones
Y el perfume dulzón de la pólvora
Dueña y señora de los sucios arrabales
Al principio fue tan fácil olvidar lo más importante...
Claro que el futuro no era más que una canción
Contagiosa que terminé por confundir
Con el ruido de mis pasos
Luego la cabeza se cayó de la bandeja
Y la nieve se ensució con la sangre y el fuego
Me miré cara a cara sin las gafas puestas
Y aunque me costó reconocerme
No pude negarme una sonrisa
Así que aquí estoy, donde tengo que estar
A la hora indicada en el sitio equivocado
Solo queda disfrutar de lo que quede en los bolsillos
Violines chamuscados, ron y cigarrillos
Arpegios que me suben por la espalda
Y un Hammond que me alienta en el cogote
Como si estuviera dándome por el culo
Un par de viernes anotados en la agenda caducada
Pezones rosados sobre un fondo de piel muy blanca
Teléfonos apagados, sueños con doble fondo
Y un vacío en la garganta con la forma de la isla de Java
Palabras como bólidos sin frenos
Palabras como nubes manchadas de nicotina
Palabras como Etta James Varvara Stepanova
Cantándole a la vida aunque todo sea mentira
Qué bueno mirar la luna nueva de enero
A la hora indicada desde el sitio equivocado
Henchida como una loba preñada de espantos
Los petardos no la alcanzan y se ríe tan borracha
De la ROGNE
A la hora indicada en el sitio equivocado
Que se apague diciembre y me olvide de enero
Qué rico el lejano rumor de un millón de explosiones
Y el perfume dulzón de la pólvora
Dueña y señora de los sucios arrabales
Al principio fue tan fácil olvidar lo más importante...
Claro que el futuro no era más que una canción
Contagiosa que terminé por confundir
Con el ruido de mis pasos
Luego la cabeza se cayó de la bandeja
Y la nieve se ensució con la sangre y el fuego
Me miré cara a cara sin las gafas puestas
Y aunque me costó reconocerme
No pude negarme una sonrisa
Así que aquí estoy, donde tengo que estar
A la hora indicada en el sitio equivocado
Solo queda disfrutar de lo que quede en los bolsillos
Violines chamuscados, ron y cigarrillos
Arpegios que me suben por la espalda
Y un Hammond que me alienta en el cogote
Como si estuviera dándome por el culo
Un par de viernes anotados en la agenda caducada
Pezones rosados sobre un fondo de piel muy blanca
Teléfonos apagados, sueños con doble fondo
Y un vacío en la garganta con la forma de la isla de Java
Palabras como bólidos sin frenos
Palabras como nubes manchadas de nicotina
Palabras como Etta James Varvara Stepanova
Cantándole a la vida aunque todo sea mentira
Qué bueno mirar la luna nueva de enero
A la hora indicada desde el sitio equivocado
Henchida como una loba preñada de espantos
Los petardos no la alcanzan y se ríe tan borracha
De la ROGNE
2 comentarios:
ya sé currata, apenas un poema al año, pero con eso es suficiente... bueno y largo, como siempre, aunque me parece que este año te van a tener que remangar hasta los codos. la poetica vuelve a la carga y este blog ecesita madera, y no ólo el blog, sino la fábrica, el ovillo, el rescates, etc.
aúpa currata, desde la luna partida y la tarde infierno que me engulle!
¿Una voz nueva?
De la Rogne, deberíamos bautizarte Du Rhytme...
Palabras sincopadas, bellos ritmos de vida con su hermana la muerte, hermosas imágenes...
¡Qué bonito el juego de clausura!
Bienvenido.
Anne Durvan -NG-
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