Si hablamos de supervivencia no podemos olvidar al superviviente por antonomasia: máximo exponente del realismo sucio, alcohólico, jugador compulsivo en los hipódromos, amante de mujeres que le intentaron amar. Pasó su vida entre botellas y bolígrafos, recibiendo negativas y contestando con resaca. Un gran escritor, grotesco y descarnado, que vomitó sobre el papel la realidad etílica de Los Ángeles de final de siglo.
CHARLES BUKOWSKI (1920- 1994)
Nos hundimos como tablas de un suelo podrido
mientras el mundo lucha por desbloquear
la estructura que le atenaza el cerebro.
(Dios es un local vacío donde no hay filetes).
- De Factotum.
4 comentarios:
y ya se sabe que sin filetes...
que grandes que eres, bukowski.
Ángel
ya ves si es grande!
¡Un trago por Carlos!
¡Salud!
cjm -ng-
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