El árbol de la ciencia, de Pío Baroja

Qué pensáis de El árbol de la ciencia, de Pío Baroja. Qué pensáis del nombre de ese libro que tuvimos que leer, obligados, en el instituto. Qué pensáis de ese nombre que suena como ha salido de la hormigonera nominalista de la confederación ibérica de los masones-rosacruces, por ejemplo. El arbolico de la ciencia. ¿No os suena mejor?

Encabezaba la lista de los libros que teníamos que leer, junto con Historia de un idiota contada por el mismo (F. de Azúa) o Campos de Castilla. Una lista que nunca supe bien quién elaboraba... Pero que me tragué entera.

Pero si hablo de las lecturas y del instituto, tengo que hablar de las clases en el patio con Juan Manuel Molina Damiani. Un viejo paraíso, sí señor, quién lo recuerda, atenden a sus explicaciones, en aquel entorno eroticamente primaveral. ¡Ay! Escuchar poemas mientras a unos metros las chavalas de COU daban vueltas alrededor de la pista de atletismo...O lo que a nosotros se nos antojaba una pista de atletismo. Amo la literatura desde entonces. No podría ser de otra manera, lo explica la psicología.

Volvamos a El árbol de la ciencia. ¿Os he dado la impresión de que para mí fue un coñazo leerlo? Lo siento. Me parece uno de los mejores libros que he leído nunca y ha sido de los pocos que he releído. Y Baroja me convence. Sé que al Noru también.

Allá se encontraba a su gusto, solo; decía que estudiaba mejor con aquel silencio; pero muchas veces se pasaba el tiempo leyendo novelas o mirando sencillamente por la ventana.